
En su desesperación (y pese a la asumida insignificancia que la caracteriza) la minúscula puede desear convertirse en superstar. Su desproporcionada imaginación la llevará a creer que, una vez lograda la admiración de tres o cuatro fans, se verá retratada en un sello postal como ocurre con los personajes más importantes. Piensa* que sobre ese pequeño trocito de papel (al que ella llama ingenuamente "alfombra mágica") vivirá como una trotamundos, libre como siempre soñó ser.
* en fin, todo lo que el verbo "pensar" pueda aplicarse a una minúscula
Magníficas reflexiones. Propias de una A de caja alta, versal y superlativa.
ResponderEliminarSaludos.
Pues yo creo que si hay una minúscula presumida, más que ninguna, tiene que ser la i; y la I no le llega ni a la suela de los zapatos.
ResponderEliminarBesos.
Salen del diccionario para insertarse en un poema.
ResponderEliminar¡Y qué belleza encontrarlas allí!
:)
Un beso, querida aminúsculA
Me haces sentir tanto cariño por las minúsculas, que me provoca protegerlas a todas!!. ¡Qué horror, la alfombraroja! Y esa pobrecita minúscula rodea de paparazzis. Ni me lo quiero imaginar.
ResponderEliminarESTE BLOG ME ENCANTA. Ya le agarré un cariño horrible a las minúsculas. Ya no puedo vivir sin ellas.
Un beso,
Dios mio, todo un mundo de minúsculas !..y los dibujos son tuyos, no?..es un blog doblemente trabajado. Se me ha girado trabajo, me voy a leer como viven o sobreviven un montón de minúsculas... :-)
ResponderEliminarSaludos de alcachofa
Estas minúsculas acabaran en mayusculas de puro superdotadas...
ResponderEliminarUn beso,
Hilda
Es que las etiquetas y las definiciones a veces desesperan hasta el punto de imaginarnos alfombras magicas. Saludos.
ResponderEliminarLo bueno es que creen en la libertad y con mayor o menor éxito la buscan, sacan los pies del tiesto...
ResponderEliminarUn besito
Salen del diccionario para quedar retratadas en tus bellas imágenes, siendo las protagonistas de tus historias.
ResponderEliminarSaludos
Cortazar afirmaba que el diccionario era un cementerio...con todas las maravillas que uno puede encontrar en sus espacios...tu post ha algrado este día
ResponderEliminarNada hay minúsculo si esconde sonidos...
ResponderEliminar...las buenas esencias se guardan en tarros pequeños...dile de mi parte, que hace muy bien, en querer darse un paseito, fuera del diccionario.;)
ResponderEliminarCuantísimo me solidarizo con esa minúscula, por la desbordante imaginación, más que nada. Y porque soñar es gratis y, a mayores, bastante beneficioso para la salud. Y porque sentirse encerrada es de lo peor que hay.
ResponderEliminarla belleza de lo pequeño, de las minúsculas... Besos!
ResponderEliminar¿Qué piensa una amnúscula sobre el tapón de corcho?
ResponderEliminarPobres minúsculas. Seguro que no saben que eso de escribir cartas ya no se estila y que, por tanto, si apareciesen en un sello, quedarían recluídas en el álbum de algún coleccionista o lo que es peor, envueltas en algún escándalo financiero.
ResponderEliminarEs lo que tú dices. Santa Inocencia.
Besos mayúsculos
En breve, Imagina, escribiré un post sobre ello, con mucho gusto.
ResponderEliminarUn besito
En cierta medida todos necesitamos un trocito de papel con el que volar hacia nuestros sueños.
ResponderEliminarSalud
Demasiado profundo para mi!
ResponderEliminarSaludos